Nueva forma de placer

Te invito a que seas honest@ y realmente consideres si te atrae, te da curiosidad, pero no sabes por dónde empezar, si te has tocado y sentido placer y quieres saber más, si te lo ha pedido tu pareja y estás dudando si accedes o no, o si te aterra, te da “asquito” o, sólo debes aparentar que te da asco y te “asustas para que no piensen mal de ti”, cualquiera que sea tu respuesta está bien y es 100% válida.

Más allá de las barreras mentales que sientas tener por creencias, costumbres y la parte higiénica, la verdad es que el sexo anal, como toda actividad sexualidad, es para disfrutarse. Recordemos que esta práctica existe desde hace siglos y es mucho más común de lo que te imaginas. Para muchos es el poco conocimiento y la falta de experiencia lo que causa el rechazo a esta práctica y para otros puede ser que la hayan intentado y la experiencia les haya sido dolorosa por no prepararse adecuadamente.

En este blog, como en mi práctica general de asesoramiento, no pretendo convencerte de que lo hagas o no, lo que me interesa es que cuentes con la mayor información posible, que sea fácil y práctica para que tomes una decisión informada y tengas una sexualidad plena, consciente y libre.

Lo primero que debes saber es que nuestro ano NO miente, si no quieres !NO lo hagas! pues, a diferencia de nuestra vagina que es elástica y bastante, el ano no tiene esa capacidad de resiliencia y puede sufrir laceraciones y/o fisuras que pueden minar tu salud.

Empecemos entonces con el ABC por si decides experimentarlo y ampliar tus posibilidades de placer te prepares. Considera que debes tener paciencia e ir paso a paso, es un encuentro que toma tiempo, no puedes presionarlo y requiere buena comunicación con tu pareja.

Las reglas de oro del sexo anal son:

1.       Empieza tu sol@ a tocarte y a estimular tu ano. Sí ese asterisco tan olvidado de nuestro cuerpo necesita que lo conozcas, ¡adelante!

Acostumbra a tu ano a sentir el toque, a no “erizarse” si le pones el dedo encima, observa cómo, cuando tienes orgasmos, éste también se contrae y relaja ¿Te dice algo? … Pues que hay una relación directa de nervios y músculos de todo tu piso pélvico y por ende encuentra placer. Si lo deseas, puedes usar un juguete que tiene forma cónica, o de los delgados para poder iniciar tus ejercicios de relajación sin correr ningún riesgo y empezar a disfrutar desde la práctica.

2.       Mucha comunicación

En pareja, el sexo anal permite un mayor acercamiento pues requiere de una confianza abierta y sincera. Como en todo lo nuevo, se requiere empatía, establecer reglas básicas, paciencia y poder decirle al otro qué movimiento te excita y cual te causa dolor, poder coordinar el ritmo así como, poder establecer un juego de descubrimiento que ambos disfruten. Puede ser que unas veces tu se lo hagas a él y otras él a ti y después, ya que se sientan cómodos, pueden incorporarlo a su práctica sexual de rutina si lo desean.

3.       Mucho lubricante

En muchas ocasiones y en las pláticas de sexualidad les he compartido la anatomía del ano y ya sabemos que este no tiene lubricación natural. Esto quiere decir que no humecta, ni eyacula. Así que necesitamos lubricante y requerimos mucho más que en la vagina. Por la ficción y la duración del lubricante yo recomiendo usar uno mixto de base agua con silicona, o de silicona para que la lubricación dure más y no tengas ningún problema ni dolor. Ve en mi tienda el lubricante: LARGA DURACIÓN 4 OZ LARGE.

4.       Lo que entra en el ano no entra en ningún otro lugar

Ya sea que estés introduciendo dedos, juguetes anales, pene u otra cosa, de preferencia usa condón, hay unos condones para dedo también muy útiles (pregúntame por ellos y te los mando de regalo en tu compra). El ano, nuestras heces y fluidos son algo natural sin embargo, lo cierto es que en él viven muchas bacterias y tiene un PH diferente a otras partes de tu cuerpo por lo que debes tener extremos cuidado con tu higiene.

Si usas un dedo para la vagina, usa otro dedo o la otra mano para el ano, si usas un juguete para el ano, usa otro para la vagina y clítoris, no los intercambies. Si estás con pareja usa un condón para sexo anal y cámbialo, limpiando también alrededor del pene para que pueda volver a entrar en vagina ya con un nuevo preservativo.

5.       El que es penetrado marca el ritmo

Este punto es más relevante si estás iniciándote pues, como debes estar muy relajada y muy probablemente estás rompiendo miedos, tabúes y experimentando algo nuevo, tú debes marcar la forma y hasta dónde entra para evitar dolor.

6.       NO hay prisa!!

Lo he mencionado en varias ocasiones pero insisto en esto de la paciencia, de verdad es importante no haya presión y te tomes tu tiempo. Si tu pareja lo quiere, que coopere y se apegue a los acuerdos que hagan, al igual que tú debes aceptar lo que el quiera para su cuerpo o hasta donde el quiera. Disfruten los previos, disfruten irse conociendo sin penetración, sólo tocándose y viendo cómo reaccionan y compartan. No todo sexo anal debe llevar penetración de pene. Puedes tener sesiones muy plenas con solo toques de los dedos, con sexo oral y con juguetes. Ve suave y despacio.

7. Planea tu encuentro

Si aún no te sientes muy cómod@ con la idea de que puedes embarrarte o embarrar a tu pareja y te da “cosita” La primera el sexo anal si no tienes experiencia y lo practicas seguido requiere preparación, sino lo más seguro es que tendrás una experiencia dolorosa, que puedes evitar. La segunda razón es para que puedas comer ligero uno o dos días antes, si prefieres puedes hacerte una ducha/ edema anal para limpiar la última parte de tu ano que estará en contacto con lo que introduzcas.

8. Usa Juguetes anales

Yo los aconsejo muchísimo para ir preparando a tu cuerpo y/o para incluirlos en la práctica y los juegos. Los juguetes tienen varios propósitos y entre los principales es que sirven para entrenar al ano a relajarse y abrirse y también que puedes elegir ancho y largo y algunos vibran. Quédate al pendiente del próximo blog sobre los plugs anales para aprender más sobre ellos.

Mitos sobre el sexo anal

Primer mito:

Si mi pareja hombre me lo pide es porque es gay o se puede volver homosexual.

NO, nada que ver. Una cosa es el deseo y placer que te puede dar el cuerpo por la anatomía y por el mero hecho de sentir y otra las preferencias sexuales. No te preocupes, es muy normal que les guste pues se estimula directamente su próstata a parte de que tenemos muchas terminaciones nerviosas. Y también se ha vuelto un tipo fetiche por tanto porno que hay por ahí.

Segundo mito:

El sexo anal es más para que el hombre penetre a la mujer pero la mujer al hombre no, eso es de “raros”

NO, no es de raros, ni es malo. Hay muchas prácticas en las que la mujer puede satisfacer al hombre jugando y penetrándolo, son sólo roles y juegos y si lo disfrutan no pasa nada. Puedes disfrutar de ello pues ambos tenemos energía femenina y masculina y son meramente conceptos aprendidos que te limitan.

Tercer mito:

Si tenemos relaciones anales, siempre va a querer hacerlo así y se va a olvidar de lo demás. No, no tiene que ser así, pueden desde el principio sentar bases y platicarlo. Decir esto es especial, o me gustaría hacerlo pero sólo a veces … cada pareja sienta sus reglas. El que ea su juego hay que variarlo para mantenerse con la fantasía, y el deseo.

Cuarto mito:

Es lógico que duela pues el ano no es para eso.

No, no debe doler muchísimo o insoportable NO, ya lo platicamos. No te asustes y relájate si duele un poco al principio, este debe ser tolerable te estás acostumbrando. Mucho lubricante, mucha relajación y ganas de experimentarlo, debes estar muy excitada y relajada!

Quinto mito:

No hay placer

Los orgasmos anales son muy fuertes y placenteros, si son de penetración profunda en hombre estimulan próstata y en mujer la parte cercana al punto G, así que si, sí tendrás placer y muchos MYOHHs

Higiene

Si te sientes más a gusto y tienes tiempo de prepararte puedes tener una ducha anal o tratar de no comer pesados días antes para mantener la parte final de tu intestino limpio.

Si puedes contraer alguna ITG o ITS así que procura usar condón. Cambia el preservativo en cada encuentro. Limpia tus productos y juguetes con un antibacterial. Sigue las demás recomendaciones del blog.

Consulta a tu ginecólog@ si tienes hemorroides, laceraciones o sientes alguna incomodidad que persista.

Si tienes algún comentario o sugerencia por favor escríbeme, me encantará saber de ti

Parte de esta información salió del LIVE realizado en cooperación de @tuppersexvm.

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